Olor a comida

Hace unos días escribí lo agradable que es que uno tenga su casa con olor a limpio. Que como este aroma le regalaba al hogar identidad, sensaciones y demases.
Bueno hay otro tipo de olor con el que no me había tocado lidiar en mi hogar, y era con el olor de la cocina, el olor a comida.
Ayer después de hacer una nota en el show de Scooby Doo, y luego de fantasear con Vilma (Daphne era muy perna, y si te fijabas con atención Vilma bajo ese disfraz de sabihonda era una maquina, había solo que descaracterizarla), me pase directamente al supermercado - donde encontré todo caro – y me dispuse a probar mi nueva BurgerGrill, con el producto que le dio propósito. Compré tres hamburguesas, dos hallullas, cuatro láminas de queso y una lechita de vainilla, $1.200 (se acaba el presupuesto de manera dramática, hay que aguantar).
Así que realmente cagao de hambre llegue a la casa a preparar las burguers y los selladitos de queso.
La BurgerGrill Somela es algo que cualquier weon soltero debería tener en su casa, es una maravilla de maquina que lo único que hace es facilitarte la vida y eliminar la grasa indeseada de las burguers. Lo máximo si piensas en todo lo que puedes llegar a hacer. Se me ocurrieron churrascos, brochetas, pescado, pollito, embutidos, una maravilla weon, una maravilla. COMPRENLAAAAAAA.
Bueno en total me comí tres hamburguesas, dos en hallulla, una en selladito, y dos selladitos mas por si las moscas, mas el jugo de frutilla que me quedaba, y la lechita por supuesto. La cuestión es que al dormir, mi mente como que se alió con mi estomago y empezaron a crear fantasías y delirios, que finalmente me hicieron despertar un ay otra vez. Pesadillas nuevas, hace rato que no soñaba feo, soñé que lo perdía todo, la pega la casa, la BurgerGrill, la play, horroroso…Al final desperté hoy en la mañana medio de malas, pero con un selladito, mas una ducha caliente todo se resuelve.
Cuando desperté en la mañana lo primero que me llamó la atención era el poderoso olor a comida que se acumuló en mi depa. Creo que el fin de semana me toca abrir las ventanas de par en par, todo el día, aunque me cague de frío, así además de irse el aroma de la comilona, se van también los demonios que me molestan, y que no me dejan dormir algunas noches, y quien sabe si Comegalletas encuentra a un amigo o amiga en la ventana con quien jugar, esperemos que no sea un gato, por que si no hasta ahí no ma llega mi socio.

Los quiero a todos,
Vengan a verme, que ya tengo dos vasos más.

Pancho®

A bueno, ayer cuando se sintió el olor de las burguers por el edificio parece que llego bien lejos por que me vino a ver este tano de otro edificio más allá. Es amigo mío de hace tiempo medio pecha, pero wena onda, medio “lentito” no ma, pero wena persona. Aquí Joey se pone pa la foto y sonríe mientras juego DBZ Budokai 3.